El 13 de octubre fueron arrestados diez miembros de la izquierda independentista vasca, entre ellos gente con mucho liderazgo como Arnaldo Otegui. ¿La excusa? Que estaban tratando de reconstruir Batasuna bajo el nombre de Bateragune. Al revés, podemos decir que continúan encarcelando la libertad, el derecho a decidir. Si ya fue esperpéntico el ataque hace unos meses contra la candidatura de Iniciativa Internacionalista, ahora rozamos, traspasamos límites que marcan claramente quienes no quieren solucionar el conflicto vasco. Ellos, los de siempre.
Paso por aquí un extracto de un comunicado promovido por la izquierda abertzale (del 15 de octubre) que me parece muy ilustrativo del momento que se está viviendo:
Por tanto, el ataque policial que hemos sufrido, aun siendo muy grave, esta condenado al fracaso. Este ataque del gobierno español deja bien claro donde reside el problema. El problema no es ETA sino las iniciativas políticas que este pueblo pueda llevar a cabo para lograr su soberanía.