En pocos meses publicaré un ensayo sobre Aragón como construcción nacional. Es una obra que la llevo cocinando a fuego lento durante muchos años, quizá demasiados, por eso algunas de las tesis o ideas-fuerza que argumento se han ido oxidando.
Defiendo la importancia de los movimientos sociales en defensa de la tierra a la hora de articular discurso en (y para) la identidad nacional aragonesa. Los dos ejemplos que desarrollé son el movimiento por la Dignidad de la Montaña, y también Teruel Existe.
Teruel Existe nace en 1999, para denunciar el abandono histórico de los territorios pertenecientes a esta administración provincial. Tuvieron bastante tirón mediático y sus movilizaciones eran frescas e ingeniosas. Les salieron imitadores como Soria Ya, Zamora También Existe, La Otra Guadalajara -(sic), Molina de Aragón-, y hace unos meses realizaron una masiva mani en Zaragoza, expresando la agonía del sur aragonés.
En los últimos tiempos el discurso de Teruel Existe y su entorno ha cambiado mucho respecto a lo que expongo más arriba. Aquí tenéis una «perla» de su entorno, que nada tiene que ver con ese relato aragonesista:
Y otro toque más, con una contestación al presidente de Chunta, enarbolando la igualdad centralista a la francesa, sin lenguas ni diferencias «artificiales»:
No sé si esto tendrá algo que ver con la evolución identitaria que se percibe en el CIS (aumento progresivo de la gente que se «siente únicamente española» frente al descenso de los que se «sienten más aragoneses que españoles»), el juego de espejos deformados respecto al proceso soberanista en Catalunya o que nos hemos vuelto locos. Tampoco es que Soro se luzca mucho -así va también la Chunta, reblando en el relato-. Desconocer la historia, te condena a repetirla, o simplemente te engullirá (despoblación). Los problemas de Teruel se agudizaron con el dictador Franco, pero venían de atrás (Primo de Rivera, los turnistas de la Restauración, gobiernos liberales del XIX…), ¿ingredientes comunes? España, España y España. Pero sigan mirando para otro lado. Keep calm…
noviembre 14, 2018 at 13:25
Al principio Teruel Existe era lo que cada uno quería imaginar, y como había ganas de algo, tuvo éxito. Después se vio que en realidad era un movimiento de corte burgués y urbanita, formado principalmente por funcionarios de Teruel capital, de mediana edad y con mucho tiempo libre. Dedicaron todo su esfuerzo a reivindicar el paso de un AVE por su ciudad, y tiempo después de una autovía por Alcañiz, por guardar las apariencias provinciales. Pero de la inmensidad del territorio y sus problemas reales ni se acordaban. Realmente ni los conocían, pues si la desconexión de Zaragoza para con Teruel es tremenda, la de la capital con el resto de la provincia no lo es menos. Hablamos de servicios básicos, como el médico o la farmacia, de la escuela o de los horarios de la furgoneta del pan. Pero estas cosas tienen menos glamour que hacer propuestas de tráfico “transcontinental”. Ahora, los que quedan en Teruel Existe son más viejos, rondando la jubilación, y claro, se han ido enranciando y cayendo en ideologías más reaccionarias que, no tardando mucho, desembocarán en una propuesta política que defenderá sin tapujos la independencia autónoma de Teruel en un modelo de estado español regionalista. Quedará en una anécdota.