Justo ahora que pasa la efemérides del fallecimiento de Labordeta, se van concretando las alianzas electorales de cara al 20-N. Hoy mismo Mariano Rajoy firmará su pactito con el PAR para ir juntos tanto en el Congreso como en el Senado. Un acuerdo natural que demuestra una vez más las artes maquiavélicas de Biel, tipo curioso, capaz de rehacerse a sí mismo las veces que haga falta. Eso sí, siempre que su partido tenga poder territorial, el día que lo pierda veremos que pasa. Por otro lado es inminente el acuerdo CHA-IU para ir de la manita, un bloque de izquierdas que no me desagrada en sí pero que tiene bastantes contradicciones que imagino tratarán de ocultar o pulir. Es la primera vez que se produce esto en Aragón, entre partidos parlamentarios, por lo menos desde 1936.
Creo que el plano nacional queda subsumido con ambos acuerdos. La crisis del capitalismo ha globalizado todos los discursos y actuaciones, haciendo que todos los agentes políticos jueguen la baza de «lo social», a unos les dará igual ir de la manita con un partido que defiende el trasvase del Ebro, y a los otros con formaciones que apoyan recrecimientos como el de Yesa. Por eso, sigo pensando que la alternativa está fuera de esos extraños tableros. Habrá que articularla. Claro está.
octubre 3, 2011 at 13:25
El nacionalismo español, representado por el PSOE y principalmente por el PP cada día se está haciendo más fuerte y tienen menos fisuras. Existe un bombardeo de la «idea» de España a través de los medios de comunicación, de la opinión común (que os voy a contar…) y ellos no entienden de exigencias (aceptación de las diferencias, derechos de autodeterminación, respeto, al fin y al cabo) ni de fracturas en su pensamiento común.
Pero los aragonesistas, y sobre todo los soberanistas tienen una «virtud», es la autoexigencia y una distinta vara de medir al político propio que nuestros rivales políticos. No existe una unidad que represente al nacionalismo aragones. Chunta durante unos años pareció ser esa columna donde todos nos apoyábamos, pero a día de hoy no lo es. A pesar de mis diferencias con la dirección de Cha yo voy a apoyar la coalición con la «federalista» IU. Creo que es la única manera de tener un espacio, aunque sea pequeño en el Estado. Y no veas como jode al españolismo que se consiga un diputado nacionalista aragonés (ellos se piensan que somos todos tan serviles y cobardes como la mayoría españolista).
Y valentía, que tenemos mucho de lo que sentirnos orgullosos.
octubre 25, 2011 at 13:25
Seguramente yo también les votaré al Congreso, Ribagorzano. El argumento que planteas es el único válido, pero es un argumento meramente defensivo. Los nacionalistas aragoneses debemos unirnos, abandonando el concepto de «aragonesismo político», que de tanto uso ya no identifica nada. O nos unimos, o dejamos de contar políticamente en Aragón.