O 41.769 votos para el parlamento nacional. No está mal. Casi doblan los apoyos de hace cuatro años. Lejos quedan los tiempos en los que esta formación estaba en el limbo extraparlamentario, con un Aragón a la gallega en el que parecía que el espacio a la izquierda del PSOE se lo llevaba una CHA vestida de BNG. En todo caso, muy buenos resultados, ya que pasan de 1 a 3 concejales en el ayuntamiento de Zaragoza, mantienen su edil en Uesca y vuelven a tener representación en Teruel. Han sabido pescar bien a río revuelto, a pesar de que algunas fotos como la de Cayo Lara en la acampada de Puerta del Sol me hagan pensar en un interés interesado. Ellos y CHA suman un 15% del electorado, un peso importante para dos formaciones con un programa en lo social bastante parecido (medidas para salir de la crisis, defensa de la clase trabajadora). En lo aragonés, son como esos cafés americanos, «aguachirri» diría mi yaya, un poco para decir nada. Eso sí esta coalición soporta mejor que peor las tensiones internas entre cupulistas-oficialistas de IU y el PCE, con todo lo que ello conlleva. Bien por ellos, mejor un parlamento con ese tinte de IU que no ver escaños ocupados por UpyD y partidillos ultramontanos españolistas.